Centroamérica es una región que muchas veces pasa desapercibida para los negocios, pero en la que se está moviendo últimamente mucho dinero, aunque eso sí, casi siempre capital extranjero que pocas veces repercute en la economía de sus países. Sin embargo, las cosas están cambiando gracias a un aumento y mayor valoración de las exportaciones desde estos países, y también del dinero que los emigrantes envían a sus familias a través de otros países, en forma de remesas.
Todo este capital está creciendo de manera sorprendente en los últimos años en la mayor parte de los países Centroamericanos, pero eso debe conducir también al propio crecimiento económico de dicha región, a través de un mayor consumo de las familias, y de una mayor inversión de las empresas que exportan, para poder seguir creciendo en todo este tiempo. Ahora vamos a ver a fondo las claves que llevan a este crecimiento constante.
Economías pequeñas orientadas al sector de los servicios
La mayoría de países centroamericanos tienen dos tipos de sectores importantes dentro de su economía. El sector primario, con la creación y exportación de materias primeras, que es cierto que en los últimos tiempos se está especializando todavía más, y sobre todo el sector terciario, dedicado a los servicios, tanto en lo que se refiere al turismo como a la gran cantidad de negocios de todo tipo que se abren en las ciudades y pueblos. Son economías todavía pequeñas, pero que están sacando adelante el peso de toda la región en lo económico, con buenas previsiones de crecimiento, algo que también se explica fácilmente por venir de situaciones muy complicadas y con economías bastante pobres, donde es más fácil crecer.
¿Cuáles son las expectativas para un crecimiento favorable?
Parece que en los próximos años, al menos a corto y medio plazo, el crecimiento en la región será constante, gracias a los sectores ya mencionados. La exportación de bienes, el sector servicios que seguirá creciendo a la par que lo hace el turismo, el aumento en la calidad de los servicios de las propias empresas y su competitivo precio final para los productos, hace que muchos estén poniendo los ojos en Centroamérica como una región importante para invertir, algo que también es imprescindible para que el crecimiento se siga dando durante los próximos años. Bien es cierto que todavía se está lejos de datos de otros países de primer nivel, pero se está en el buen camino.
Exportaciones de bienes y servicios
Los países centroamericanos están siguiendo una racha bastante importante en cuento a las exportaciones, sobre todo de bienes, aunque también de servicios. Esto hace que los países tengan contacto directo con otras economías y que el dinero entre ambas, antes enquistado, pueda fluir sin problemas. Los servicios también están creciendo y no solo dentro de estos países, sino también en cuanto a su exportación. Hay muchos profesionales que se dedican a trabajar desde estos países para vender fuera todo aquello que hacen. Esa entrada de dinero desde el extranjero no es óbice para que también consigan vender en el propio país, generando riqueza por ambas partes, que es lo más importante.
Ingresos por remesas familiares
Son muchos los hombres y mujeres que, buscando una vida mejor, tuvieron que salir de sus países para emigrar a otros con mejores perspectivas de futuro. Las remesas familiares, ese dinero que esos emigrantes mandan desde los países donde están trabajando, también han crecido de forma sorprendente en casi todos los países de la región, salvo en Panamá, donde han bajado. Las remesas llegan sobre todo desde México, España y Estados Unidos, aunque también hay mucho movimiento de remesas procedentes de los países de Sudamérica e incluso de otros países europeos como Francia, Alemania o Reino Unido. Estas remesas suponen un soplo de oxígeno para muchas familias locales, que tratan de sobrevivir con lo que tienen, y que esta ayuda les llega como caída del cielo.
Fuertes relaciones económicas y comerciales intrarregionales
Otra de las claves para el crecimiento de la propia región son la relaciones intrarregionales entre los propios países que la conforman, que cada vez son más fuertes y están más seguras. Esto hace de Centroamérica una región más importante de lo que sus países podrían serlo por sí mismos. La unión hace la fuerza, como suele decirse, y gracias a todo el apoyo que los países de esta región se muestran entre sí, a través de la firma conjunta de tratados, de las negociaciones globales y demás, toda la región se ve beneficiado de cada éxito que ocurre. Si esa relación intrarregional se sigue alimentando, el crecimiento de Centroamérica parece asegurado por completo en los próximos años.
